REDACCIÓN DE UN MOSQUITO EN HALLOWEEN

Un día en Halloween  Sócrates, que era un mosquito, que tenía la trompa tan larga como la de un elefante, unas alas muy potentes... no tenía disfraz y quería ir a una fiesta, pero tenía que ir disfrazado. Él le dijo a su madre que tenía que comprarse un disfraz. Fueron a una tienda y el que más le gustó fue el de Frankenstein. La camiseta era de color verde con dos agujeros para meter las alas, los pantalones de color negro y un gorro que salía el pelo de Frankenstein. Cuando llegaron a su casa su madre le pinto la cara ya el se fue rápidamente a la fiesta. Cuando llego a la casa donde se celebraba la fiesta, entró y se puso a bailar. Sobre las once de la noche las luces se apagaron  y entró un fantasma, todo la gente se escondió, menos Sócrates que cogió una barra de metal para luchar contra el fantasma. Sócrates se dio cuenta que el fantasma traspasaba la barra. Le dijo que se lo llevase a el y a las otras personas las dejara en paz, el fantasma acepto y se lo llevo. Desde ese día todas personas que estaban en esa fiesta lo recordaran, porque les salvo la vida.